El pasado jueves visitamos el Auditorio de Alcobendas, unas instalaciones sobresalientes pero lo mejor de todo el equipo humano que allí trabaja y sobre todo el jefe de luminotecnia, Marco Vargas, un maestro en el campo de la iluminación, una persona entusiasta, enamorada de su trabajo y que transmite un vitalismo y energía envidiable. Gracias Marco por compartir tus conocimientos y tu tiempo con nosotros. Hasta otra, maestro.